25 octubre 2010

Facundo Ardusso, piloto oficial Toyota

Historias de un sueño
que nació en la cancha
y terminó en la pista


(Por Florencia Salvucci) Pocas veces aparecen historias tan sorprendentes como la de Facundo Ardusso, un joven oriundo de Las Parejas, provincia de Santa Fe, que no dudó en decirle que no al fútbol para hacer lo que siempre soñó: conducir autos de carrera. Si bien desde pequeño Facundo supo cosechar aplausos jugando como delantero en Sportivo Las Parejas, y aunque muchos le pronosticaban un futuro prometedor alrededor de la pelota, con sólo 14 años él sabía perfectamente que su verdadera pasión no estaba en el verde césped de un estadio. Muy por el contrario, su futuro estaba ligado a transitar por las entramadas cintas asfálticas de las pistas de autos. Y sin dudas, no se equivocó en su elección. Hoy, con 22 años, el pibe que pasó por varias categorías nacionales, que tiene un campeonato en su haber, no deja de deslumbrar en las pistas y ya es una de las promesas del TC 2000 para esta temporada.

- Teniendo en cuenta que tuviste la posibilidad de jugar en River, ¿qué te llevó a dejar de lado el deporte de la pelota y dedicarte de lleno al automovilismo?
- Lo de River fue en 2005 y en ese momento yo estaba corriendo mi primer campeonato de Karting. Al poco tiempo debuté en la fórmula interprovincial y a partir de ahí salté a la Fórmula Renault donde definitivamente me di cuenta de que el automovilismo era lo mío.
- A pesar de tu corta carrera, en poco tiempo pasaste por varias categorías. Arrancando con el karting, siguiendo con la FR 1.6, el Turismo Nacional C3 y actualmente en el TC 2000. ¿Qué cosas te dejó cada una de las categorías?
- Obviamente que cada una tiene lo suyo, pero de todas aprendí mucho. Tuve y tengo la suerte de contar con grandes pilotos al lado mío que me ayudan, me guían y que son sin dudas puntos de referencia muy importantes para mi carrera. Siempre trato de rescatar todo lo que me dicen para seguir sumando.
- En 2008 te tocó vivir un momento poco grato, ¿qué recordás de aquella carrera en Alta Gracia?
- En realidad nada. No me acuerdo ni del accidente, ni de la carrera, ni de cuando largué, nada. Hasta se me borró gran parte del domingo. Recién empecé a repasar cosas a la semana de estar en el hospital. Antes tenía una laguna en la cabeza, estaba como inconsciente, no sé. Pero cuando me pasaron a una sala común, me trajeron 50 fotos digitales para que viera cómo había quedado el auto. Y ahí fue cuando tomé dimensión de lo que había sido el accidente y me di cuenta de que la había sacado barata. No entiendo cómo no me quebré las piernas o los brazos. Sin dudas, podría haber sido peor.
- ¿Creés que se pudo haber evitado o fue un mero infortunio del destino?
- Creo que si las circunstancias hubiesen sido otras, si los pilotos hubiéramos tenido mejor visibilidad en aquel momento, seguramente el desenlace habría sido otro. Pero bueno, sin dudas hay mucho de destino en todo esto. El choque dio para pensar en millones de cosas y cuestiones que tienen que ver y hacen a la seguridad y a la conducta deportiva. Lo cual es bueno.
- ¿En algún momento el accidente puso en duda tu continuidad en el deporte?
- Para nada, jamás dudé en seguir. Lo único que destaqué, sobre todo a los pocos días del accidente, era que si yo había tenido la culpa, entonces sí iba a dejar de correr. Pero, en lo que a mí respecta, salvo esa necesidad de saber qué había pasado, jamás dudé de mi continuidad en las pistas. Correr es lo que más me apasiona y lo hago por amor.
- ¿Cuál fue la opinión de tu familia al respecto?
- Por suerte mis familiares siempre me apoyaron y respetaron muchísimo mi decisión. A mí me gusta demasiado el automovilismo y eso se los transmitía tanto a mi papá como a mi mamá. Por eso no dudaron ni un segundo en respaldarme, ellos saben mejor que nadie lo que esto significa para mí.
- Al tiempo regresaste y, en partes, te tomaste revancha. ¿Cómo viviste el campeonato logrado en 2009 en la FR 1.6? ¿Te lo esperabas?
- Sí, sin dudas. Fue algo muy gratificante para mí y para el equipo. Hicimos un gran trabajo, el auto mostró una regularidad única a lo largo del campeonato y mi equipo fue muy profesional y siempre laburó con responsabilidad. Creo que fue el mejor reconocimiento para tanto esfuerzo. Si bien era nuestra meta, conseguirlo fue algo inesperado.
- Hoy formás parte del Toyota Team Argentina, siendo piloto oficial. ¿Cómo te sentís al respecto?
- Me siento muy bien, mi objetivo era llegar a correr una temporada completa en TC2000, lo logré y además como piloto oficial. Estoy muy motivado para no dejar pasar la oportunidad porque va a ser mi primera temporada completa. Sé que tengo mucho que aprender todavía, pero tener a pilotos como Mariano Werner al lado, a uno lo deja muy tranquilo.
- ¿Qué balance hacés de lo que va de la temporada?
- Creo que hasta ahora el balance es muy positivo. Sin dudas que el trabajo que venimos haciendo es muy bueno y eso se ve en los resultados. Este año, más allá de algún que otro tropezón, venimos teniendo mucha regularidad y esperamos terminar de la mejor manera. Creo que por ser mi primer año, es más que aceptable.
- ¿Cómo ves la actualidad del deporte en el país?
- Lo veo muy bien, tenemos pilotos de mucha calidad. De a poquito va evolucionando. Hoy si bien sigue siendo un deporte caro, hay muchísimos jóvenes que tienen la oportunidad de sumarse a las competencias y eso es bueno porque aporta para el desarrollo de la actividad.
- ¿Creés que se lo debe modificar en algún aspecto?
- Seguramente, el automovilismo tiene sus pro y sus contra, y obviamente siempre hay que perfeccionase y cambiar. Creo que se ha hecho un gran avance en cuestiones de infraestructura, seguridad y conducta, pero falta respaldo. Argentina tiene pilotos de muchísima calidad pero que, lamentablemente, no cuentan con el apoyo que se necesita para avanzar y creo que eso debe ser un punto a modificar.
- En la actualidad son cada vez más las mujeres que se animan a salir a las pistas. ¿Cómo ves esta incursión?
- Me parece muy bien, de hecho hay un par de chicas que corren en categorías zonales o provinciales y lo hacen a la par de los hombres, le corren de igual a igual. Creo que hoy en día las cosas se han modificado y los prejuicios no pesan tanto como antes.
- ¿Cómo es tu vida fuera del automovilismo?
- Tranquila, muy normal. Reparto mi tiempo entre los entrenamientos, las carreras, el estudio, la familia y los amigos. Creo que sin ellos todo el resto sería imposible, por eso trato de compartir con ellos todo lo que puedo.
- ¿Cómo te ves de acá a un tiempo?
- Me veo corriendo en el TC 2000, seguro. Si bien más adelante me gustaría ejercer mi profesión de contador público, por el momento me cuesta pensarme fuera del automovilismo. Es lo que me apasiona y, definitivamente, hoy quiero hacer esto.