LIBERTAD ES DE PRIMERA
De la mano de Tesido
se queda un año más
El equipo celeste logró pasar el triangular por la permanencia
y además, ocupará la plaza que dejó Red Star en los playoff
(Por Ayelen Ares) Después del batacazo que dio Libertad tras vencer a Saladillo en la cuarta fecha del triangular por la permanencia, el equipo de Leandro Tesido debía ganar en su quinto partido frente a un golpeado Red Star, para definir el triangular y mantenerse en primera. Con más ganas que juego lo consiguió, y no sólo mandó al descenso al equipo de San Lorenzo, sino que también ocupará su lugar en la plaza que dejó bacante en los playoff. “Es un gran alivio, es sacar una mochila llena de piedras que tenía este grupo” expresó el entrenador al finalizar el partido.
Si hay algo que identificó a cada partido que se disputó en este triangular por la permanencia, fueron los nervios y adrenalina pero, por sobre todo, la lucha que se vio en cada jugada. Y no era para menos porque lo que estaba en juego era nada más y nada menos que la permanencia en la máxima categoría.
“El que no se calienta y no pone lo que tiene que poner en esta instancia, es porque le corre agua en las venas”, así lo vio Tesido, el técnico celeste.
Era previsible que los cotejos iban a alejarse del ideal deseado para un partido de básquet, ya que a las deficiencias técnicas, o anímicas que llevaron a los elencos a esta instancia, hay que sumarles los nervios lógicos de saber que en algunos partidos se define un descenso. Por eso le costó tanto a un equipo como Libertad cada juego disputado, pero con la experiencia de los más grandes y la garra de los más chicos, pudieron sacar adelante una situación que parecía que no iba a tener un final feliz hace un tiempo atrás cuando los malos resultados del equipo derivaron primero, en la partida de Marcelo Santinelli, y luego en la renuncia de Gustavo Móndolo en la conducción del primer equipo.
Pero Leandro Tesido iba a cambiarle la cara al conjunto celeste, ya que desde su llegada, con un grupo totalmente hundido tanto en lo anímico como en el juego, el actual técnico ganó cinco de los siete partidos que restaban en el campeonato. Y si bien no pudo realizar el milagro de salvar a Libertad de la permanencia, se encargó de que llegaran al triangular con una realidad muy diferente, y no sólo impuso su estilo de juego, sino también le devolvió la confianza a un equipo que hacia rato la había perdido. “Fue una sorpresa que me hayan ofrecido el puesto. De todas maneras, lo tomé con mucha responsabilidad porque me gustan los desafíos —indicó Tesido—, lo principal fue intentar cambiarle el mal momento que estaban pasando los jugadores, estaban muy bajoneados, pero les tenía mucha fe, no tenía dudas de que en este plantel las cosas se podían mejorar”.
Libertad contrariamente a cómo finalizó el torneo, arrancó el triangular con una derrota frente a Saladillo por diferencia de un punto, lo que dejó al equipo celeste con un sabor agridulce, ya que a pesar de que pudo haberlo ganado, lo perdió en el último segundo y se quedó sin nada en el partido más importante del mini torneo.
Lucas Cichirillo, jugador celeste y figura en este torneo recordó: “Esto de jugar el triangular es increíble. El nivel de tensión con el que se juega es terrible. Si llegaba a ganar Red Star quedábamos todos iguales. Pero mirando el tema de nuestro lado, dentro de lo malo que fue haber perdido, al menos fue por la mínima diferencia”
Pero gracias al enorme trabajo de Tesido en la parte psicológica, el plantel empezó de cero y rectificó su confianza en el segundo partido frente a Red Star, donde consiguió la tan esperada primera victoria.
De esta manera llegaba al partido frente a Saladillo con una victoria y una derrota, pero conscientes de que el equipo que estaba en frente, con la victoria conseguía la permanencia en primera división ya que había ganado todos los cotejos anteriores. Y ahí fue donde se produjo el batacazo de Libertad, consiguiendo un inesperado triunfo frente al puntero, dejándolo sin invicto y demorando así la definición del triangular, además de sacar una muy significante ventaja sobre Red Star, obligándolos a ganar los dos restantes partidos para seguir con chances de permanecer en la máxima categoría del básquet rosarino.
“Fue una victoria durísima, sabíamos que iba a ser así. Teníamos que ganar como sea. No importa si jugamos bien o mal, sólo nos interesaba ganar”, comentó Cichirillo, elegido como figura del partido.
Ya para el quinto, y último partido para el equipo de Tesido, la confianza estaba totalmente renovada y la esperanza y alegría de cada jugador, sabiendo que, de conseguir un triunfo, no sólo lograban la permanencia en primera división sino que además tenían un plus extra: la clasificación a los playoff, ocupando el lugar que dejaría Red Star en caso de que perdiera y le tocara descender.
Y aunque para muchos era un resultado previsible porque el equipo de San Lorenzo no había podido ganar ningún encuentro de este mini torneo, por lo que las chances de permanecer eran mínimas, se le sumó a eso el envión anímico con el que venía Libertad tras el triunfo frente a Saladillo. Sin embargo Red Star salió a buscar el partido con la cabeza fría como si fuera el primer cotejo del triangular, y alcanzó una diferencia notoria frente al equipo de Tesido en los dos primeros cuartos.
Pero el momento de las individualidades de Libertad pudo más que los minutos de gloria del conjunto de San Lorenzo, y logró dar vuelta el partido con un contundente 70 – 58, festejando por partida doble porque se queda en primera un año más y además tiene el lugar que les dejó el equipo de San Lorenzo en los playoff.
“Fue una alegría enorme haber ganado. Pero más que nada, es un alivio por la gran mochila que teníamos. Pesaba como 500 kilos” cerró Cichirillo demostrando lo que significaba para Libertad perder la categoría que tanto esfuerzo le costó conseguir.