30 mayo 2011

Como en el hielo, pero a metros del Paraná

EL ROLLER HOCKEY FLORECE
Un deporte que crece
de a poco en Rosario
La actividad desembarcó en el país hace poco tiempo y, en
silencio, ya se metió en la agenda deportiva de los rosarinos


(Por Juan Pablo Falletti) No es ninguna novedad que Rosario ofrece una gran cantidad de variantes deportivas para todo aquel que desea realizar una actividad física saludable. En cualquier rincón de la ciudad uno puede practicar de todo. Desde los más masivos como el fútbol o el básquet, hasta otros no tan difundidos como el canotaje o el patín. Todo esto en parte gracias al impulso que le da el gobierno local a los deportes amateurs. Pero hay una actividad que ha crecido en silencio en los últimos años y que promete ganar más adeptos a futuro. Casi sin proponérselo, el Roller Hockey ha conseguido ganarse un lugar en la agenda deportiva del Estadio Municipal y día a día va conociéndose más entre los rosarinos.

La Federación de Patín de Santa fe lo define como un deporte en el cual el objetivo es anotar goles en la portería contraria jugando con un disco de plástico de 2.5 cm de grosor y 10 de diámetro y de unos 100 gramos de peso. Además los jugadores pueden controlar el disco o puck usando un palo largo con una lámina curvada en un extremo, denominado stick. El detalle que lo hace diferente con respecto al hockey sobre patines es que se practica con patines tipo roller, tal como su nombre lo anuncia.
Esta forma alternativa del hockey está emparentada directamente con el tipo de juego que se practica en Estados Unidos, sin guardar demasiada relación con la forma de jugar anteriormente mencionada. Y esto tiene explicación lógica, ya que el deporte nació de la idea de seguir practicando el hockey sobre hielo en verano.
Igualmente la actividad comenzó a distanciarse en ciertos puntos del juego que le dio vida. Juan Pablo Tomassino es el entrenador de “La Nena” (equipo de mujeres que practica en las instalaciones del Estadio Municipal) y jugador en el equipo de varones de la ciudad, y detalló los principales rasgos que los diferencian. “Allá tienen otras reglas. Por ejemplo, cuando se agarran a golpes de puño está permitido, y acá no. Y está permitido chocarse, sí. Pero no tan fuerte como en el hockey sobre hielo”, expresó. Además agregó: “Acá se juega en dos tiempos de veinte minutos, mientras que allá el partido se divide en tres períodos”. También hay que mencionar que en el Roller Hockey no existe la regla del offside, y que los equipos tienen un jugador menos (5 en lugar de 6).
En cuanto al crecimiento del deporte en la región, Tomassino reconoció que Rosario está peleándola cotidianamente en busca de seguir progresando. “El equipo que juega hace mucho los torneos nacionales está bien. Hay nivel de juego comparado a lo nacional. Pero igual estamos en crecimiento”, afirmó. El entrenador remarcó igualmente que “al haber un solo equipo en la ciudad, no se genera tanta competencia en la misma”.
La actividad no deja de lado a las mujeres. Y en los últimos tiempos se ha dado un crecimiento mayor por el lado femenino. Tomassino consideró que “el Roller es una variante para las mujeres, a las que inconscientemente el hockey las atrae”.
Luciana Sturla y Nadia Argüello son fieles testigos de esto. Ambas comenzaron a practicar el deporte hace un par de años como excusa para poder encontrar un espacio tranquilo en donde patinar. Y casi sin darse cuenta terminaron metiéndose de lleno en la actividad, al punto de ser las representantes de Rosario en los torneos nacionales. Sturla ya le agarró mucho cariño en este par de años de práctica: “Es un deporte muy lindo y muy completo. Obviamente que te tiene que gustar el patín, pero combinado con el hockey está bárbaro”. La jugadora oriunda de barrio La Florida se atajó de las críticas que puede recibir el juego por ser catalogado como peligroso. “Es riesgoso jugarlo, y más por ahí para las chicas. Pero tampoco es para tanto, porque jugamos con muchas protecciones (NdR: perneras, cascos, coderas, etcétera)”.
Argüello tiene un punto de vista muy similar al de su compañera. La joven vio esta incipiente actividad como un lugar en donde poder patinar con tranquilidad, hasta que terminó jugando el deporte con pasión. “Yo hice patín diez años, pero patinaba en la calle todo el tiempo. Por eso para mis viejos era más seguro que patinara acá”, sostuvo.
Ambas afirmaron además que, en cuanto a la competitividad, en el plano local en la rama femenina se está un poco lejos. Por eso mismo Argüello remarcó que “las jugadoras de Buenos Aires hace más de diez años que se conocen y se hace complicado”. Las dos jugadoras creen que es fundamental que en el futuro el apoyo de las autoridades crezca, para poder así difundir esta incipiente actividad que surge de a poco. Al respecto, Sturla expresó: “En este último año entró a practicarlo mucha más gente. Tenemos esperanza de que el deporte crezca. Ojalá que así sea”.
Muy de a poco y en silencio, el Roller Hockey se va metiendo en la conversación de los deportistas locales, siendo cada vez más difundido. Quizás en unos años el deporte despegará definitivamente en la región. Sólo el tiempo lo dirá.