09 mayo 2011

Luchando contra la discapacidad

BOXEO: CARLOS DOMINGUEZ
“Presente un proyecto,
y me dijeron de todo”
El ex púgil y actual entrenador de boxeo comentó que planteó
como idea la enseñanza del deporte a chicos con síndrome down

(Por Gabriela Martín De Marco) Carlos Domínguez fue boxeador profesional y profesor de educación física en Corrientes. Pero además de entrenarse para sus propios combates, dedicó parte de su tiempo a la enseñanza del boxeo a jóvenes con capacidades diferentes. Actualmente está entrenando a futuros púgiles en el gimnasio del Club Atlético Rosario Central, entre ellos, a Jorge Narváez, un joven de 22 años que padece síndrome de down.

- ¿Desde cuándo se dedica a la enseñanza del boxeo con personas con capacidades diferentes?
- Yo soy profesor de Educación Física. Un día estaba trabajando en una colonia del Estado, para chicos discapacitados y uno de los chicos se enteró que yo soy boxeador y me pidió que le enseñara a tirar algunos golpes y así fue como le empecé a enseñar de a poco.
- ¿Qué método utiliza para enseñarle boxeo a un down?
- Él (Jorge Narváez) lo hace de manera recreativa. Cuando se enfrenta a alguno de los sparrings a guantear actúa de manera muy limitada y obviamente no lo golpean. Pero Jorge se maneja con absoluta normalidad, y con un gran control de los actos. Sabe medir sus fuerzas y sus movimientos. Además, el boxeo le ha permitido mejorar mucho su motricidad fina, tiene mucho movimiento de cintura, de manos y muy buen manejo de los golpes.
- ¿Eso lo logra después de un tiempo muy prolongado?
- Sí. Aunque no se logra con todos los chicos por igual. Tiene mucho que ver el grado de discapacidad que tengan, porque por ejemplo: Jorgito, sabe contar, sabe distinguir un golpe de derecha de uno de izquierda. Distinto resulta cuando un chico no sabe contar la cantidad ‑­de golpes que tiene que tirar ni distinguir la derecha de la izquierda. No creo que haya problemas en enseñarles, pero sería un trabajo diferente al que estamos realizando con él.
- En las exhibiciones de boxeo que ha participado Jorge, ¿cuál fue la reacción de la gente al ver a un discapacitado practicando boxeo?
- En las dos primeras exhibiciones le puse cabezal, no por lo que pudiera llegar a decir la gente, sino por su propia protección, pero nadie se dio cuenta. Cuando terminó la exhibición le comenté a un amigo que unos de los boxeadores era down y no me podía creer. Luego opté por no ponerle protector y la gente lo aplaudió a morir, lo que a él lo motiva mucho, porque inventa saludos, bailes, tira golpes. Se cree en su propia película de Rocky. Eso lo hace feliz y si el es feliz por qué cortárselo ¿no?
- ¿Tuvo experiencia con otros discapacitados?
- Tuve un chico con problemas motores y algún pequeño retraso mental. Un chico que andaba muy bien. Pero que luego no pudo venir más por los horarios, ya que va a una escuela especial. También recuerdo el caso de un chico que padecía una enfermedad muy extraña, tenía una pierna normal y otra pierna sin rodilla. No tenía ni rodilla, ni menisco ni tibia ni peroné en una de sus piernas. Pero vino un día, me pidió que le enseñara y se manejaba muy pero muy bien. Incluso practicaba otros deportes, si hasta jugaba al fútbol con sus amigos. Practicó casi tres años boxeo conmigo. Tiraba muy bien los golpes, lo único que le costaban eran los movimientos ya que una de sus piernas era una especie de bastón.
- Algunos sostienen que el boxeo es un deporte salvaje, incluso hay quienes no lo consideran un deporte, ¿creés que sería aceptado el boxeo como un deporte para discapacitados?
- No. Sos un monstruo, si tirás una propuesta así te tratan de monstruo, de salvaje. A mí esto ya me pasó. Yo presenté el proyecto para enseñar boxeo de manera recreativa a chicos con capacidades diferentes. Me dijeron de todo, menos bonito.
 Muchos creen que el boxeo es sólo un deporte de brutos y violentos, pero otros como Jorge Narváez encuentran en él un refugio, un momento de distracción y por qué no una forma de sentirse orgullosos de ser quienes son.