La evolución del tenis
exigió mejorar mucho
el físico del jugador
(Por Javier Echezarreta) El tenis es un deporte que permite desarrollar la motricidad y coordinación, además de ayudar al fortalecimiento y tonificación de la musculatura en los niños. Por otra parte, estimula la disciplina, los reflejos, y el sentido de la responsabilidad. No hay una edad determinada para que el niño se inicie en el tenis, ya que esto dependerá de la destreza y la capacidad del pequeño.
En general, quienes comiencen la práctica de este deporte, tienen que sentirse cómodos y poder controlar sus jugadas, porque de esta manera disfrutaran mucho más del juego y eso les permitirá conseguir un mayor aprendizaje. También es importante aclarar que el tenis es un deporte relativamente caro, teniendo en cuenta el alto precio de la raqueta y de los demás implementos usados para su práctica.
Iván Savino, profesor de las escuelas del deporte en los countrys privados Tenis y El Lago, y Matías Durá, quien desarrolla su labor en el Kentucky de Funes, se expresaron acerca de la preparación y el entrenamiento de los chicos desde el punto de vista físico, técnico y psicológico. Además se dieron lugar también para opinar acerca del circuito y de los jugadores en la actualidad.
El tenis es un deporte individual y la presión de ganar es muy grande, ya que todo depende del propio jugador. Es una realidad que en un tenista es muy importante el entrenamiento mental, porque este le permite desarrollar habilidades que no tiene y potenciar aquellas con las que cuenta. En cuanto a esta situación, Savino aclaró que en la formación y preparación de chicos de temprana edad, se deja de lado la parte psicológica y el trabajo se centraliza en conseguir que el niño se empiece a familiarizar con el deporte. “En esa etapa no se trabaja la parte psicológica o mental, sólo se busca que se diviertan y aprendan disfrutando de la actividad”, expresó. También en torno a este contexto admitió que “se intenta que el chico juegue enfocado por sobre todo en la superación personal y de que cada derrota sea una instancia más de aprendizaje”.
Por su parte, Durá aclaró que “a partir de los 15 años se comienza a trabajar con un equipo que incluye psicólogos”. Además afirmó que como en todo deporte ante la igualdad de condiciones técnicas y físicas, se comienza a notar cuál es aquél que tiene una mentalidad ganadora y que saca una ventaja por dicha aptitud. Y agregó:“Como en todos los ámbitos de la vida, es todo una cuestión de actitud”.
El tenis requiere de altas prestaciones en la mayoría de las capacidades físicas y en los últimos años han aumentado mucho las exigencias en competición debido a la evolución sufrida en el deporte. De esta manera, la presión a la que son sometidos los jóvenes tenistas implica un adelanto en los entrenamientos y un aumento de frecuencia e intensidad. En cuanto a la preparación física Savino opinó: “Hoy en día se le está dando mucha importancia, se requiere de una gran capacidad anaeróbica y de potencia. Se trabaja mucho la elasticidad y elongación para que no se pierda la soltura del cuerpo”. Además aclaró que ‑en la actualidad los chicos a partir de los 12 años ya comienzan a realizar trabajos en el gimnasio y remarcó que “eso antes no sucedía”.
También Savino describió cómo es la sesión semanal de entrenamiento de un chico que se encuentra disputando torneos. “En general se entrenan tres veces por semana durante dos horas y media cada día, una se dedica a lo físico y el resto al tenis”.
Por su parte, Durá afirmó que en los comienzos se trabaja más tenis que físico y la base está en los ejercicios de coordinación. Además explicó que en cuanto comienzan a participar de torneos más importantes la preparación física aumenta en tiempo y forma. “Las sesiones de entrenamiento dependen de los horarios y la predisposición de los chicos”, comentó Durá. Y no dejó de hacer hincapié en la formación personal, porque más allá de tener que dedicarle un tiempo pronunciado a la práctica del tenis, opinó que los niños no deben dejar de lado la educación. “No conviene que descuiden su colegio y el estudio, sino que tienen que adaptarse a eso”, remarcó.
Adentrándose en la parte del entrenamiento de la técnica del jugador, Savino expresó que “en el nivel inicial se trabaja con los denominados canastos y se les hace tirar muchas pelotas a un mismo lugar para que aprendan a armar bien el golpe”. Además aclaró que no hay un tiro determinado que se les enseñe antes que otro y admitió que “hay chicos que de entrada les resulta más fácil pegar de revés que de drive”. También aseguró que con el transcurso de los años el jugador joven va adaptando la técnica que se le enseña a su gusto o la forma que más cómoda le quede.
Por su parte, Durá se refirió a la formación de la parte técnica en los chicos que recién comienzan en la práctica del tenis. “Se empieza por trabajar la coordinación oculo-manual para mejorar la relación entre tiempo y distancia. Siempre se puede corregir cosas y tratar de que la habilidad tenística sea perfecta ”, opinó. También afirmó que el golpe que más se labura por su complejidad es el que inicia el punto en un partido y dijo: “Una gran parte de un correcto saque está dada por la ubicación de la pelota que uno lanza con la mano menos hábil. Se la debe ubicar justo por donde va a pasar la raqueta. Pero eso se debe trabajar mucho en la repetición para ganar lo que se llama memoria muscular”.
Por otro lado afirmó que a medida que los chicos van creciendo y llevan un tiempo prolongado de entrenamiento, las características del trabajo en la parte técnica van variando significativamente. “Después se trabajan las situaciones de un partido, las jugadas y se profundiza mucho más en la estrategia”, expresó Durá
El entrenamiento del tenis ha avanzado mucho en los últimos años, esto queda evidenciado en cada práctica que se puede ver en los distintos clubes. No sólo se trabaja lo técnico sino que también se ha sumado las cargas físicas desde temprana edad. Pero en la parte psicológica no se trabaja hasta los 15 años, algo que se debería implementar para que los chicos puedan asimilar tanto las victorias como las derrotas y tomar todo como un juego, para que lo principal sea la diversión.