El semillero de la
ciudad de Rosario
sigue en crecimiento
(Por Javier Sánchez) El fútbol rosarino siempre se había destacado en Argentina por tener uno de los mejores semilleros, y nutrir a varios equipos a nivel nacional, no sólo a Newell's y a Central. Finalmente la buena época de las canteras entró en un inesperado declive, y con ello el fútbol de la ciudad pareció sentir el golpe, siendo cada vez menos protagonista. Por suerte esta tendencia se está revirtiendo con mucho trabajo, pero aún así va a llevar mucho tiempo regresar a las viejas épocas en las que los juveniles parecían surgir en cantidades.
Grandes jugadores empezaron sus carreras en los clubes más importantes de Rosario, y muchos luego de ello tuvieron destino de grandeza, pudiendo desempeñarse en equipos importantes de diferentes países. La importancia en el desarrollo de los jugadores juveniles se había vuelto una prioridad importante en la ciudad, y muchos entrenadores empezaron a hacerse reconocidos por su trabajo con las nuevas generaciones de jugadores. Jorge Griffa seguramente es el más recordado: trabajando en Newell's consiguió ponerlo en un primer plano con respecto al trabajo con los jóvenes. Sin duda un experto en el tema, Griffa se refirió al bajo rendimiento que se venía teniendo en las inferiores del club rojinegro, y de Rosario en general. “El nivel cayó mucho en los últimos años, pero se está saliendo adelante”, comentó el experimentado entrenador, además agregó que “tanto Newells como Central se vieron obligados a darle espacio a los juveniles debido a la falta de dinero y algunos están respondiendo de la mejor manera”.
Otro que dio su impresión sobre cómo se está desarrollando el fútbol juvenil es Aurelio “Coco” Pascuttini, quien actualmente trabaja en las inferiores del club canalla. Pascuttini también fue sincero con respecto a que no se está al nivel de otros tiempos en relación a los jóvenes jugadores, pero se mostró optimista. “Con trabajo todo llega, hay que darle tiempo a los jugadores que tenemos ahora”, comentó el Coco, quien se mostró contento por los talentos con los que cuenta en este momento.
La falta de solvencia por parte de los clubes les dio más oportunidades a las jóvenes promesas, quienes ante la ausencia de jugadores de jerarquía tuvieron que hacerse presentes. Muchos pudieron con la presión y dejaron una buena imagen, ganándose un lugar entre los jugadores de la primera división. Otros no tanto y sólo quedaron en intenciones. Jorge Theiler, quien hoy reemplaza a Jorge Griffa en el club del parque, contó cómo esto afectó a las inferiores. “Hubo que hacerle frente a la crisis en la que estaba el club y para eso tuvimos que empezar a trabajar con los chicos como se hacía antes con Jorge -dijo el instructor-. Por suerte esta dirigencia lo entendió así y puso mucho esfuerzo para mejorar las cosas”.
El fútbol rosarino siempre fue de los mejores en el país, y a pesar de tener un bajo nivel en algunos momentos se está erigiendo una vez más como el semillero de grandes talentos. Muchos juveniles se han ganado la titularidad a fuerza de talento y esfuerzo. Aún les falta rodaje pero rodeados de jugadores de experiencia parecen no tener límites en su capacidad para mejorar. Los equipos de Rosario están creciendo a base del trabajo con los chicos, que de a poco van ganando espacio en la Primera, como sucedía en otras épocas. En algunos años se verá el fruto del esfuerzo, por ahora sólo resta esperar.